Carla Nicol Vargas FABIOLA DEL PILAR GONZÁLEZ HUENCHUÑIR Cuando el abogado interviene en sala debe mantener lo que S.H. Goldber denomina “presencia”, o lo que es lo mismo, esa apariencia de que aquel se encuentra confortable desempeñando su rol profesional, aspecto que transmite a todo el auditorio un claro mensaje: estoy seguro y confío en mi capacidad para llevar a cabo este juicio con plenas garantías. La presencia es un modo o una forma de estar que trasciende al exterior e influye notablemente en el trato que nos dispensará el juez, abogados, fiscales, testigos, peritos, etc., y la percepción que recibirá el cliente mientras nos observa, actitud que siempre es reflejo de una excelente preparación del caso como del respeto de las normas deontológicas que hemos de seguir en el contexto forense. Igualmente, la presencia aporta al profesional la confianza necesaria para superar favorablemente las incertidumbres del juicio. La presencia no puede confundirse con la r...